Miles de turistas alrededor del mundo se valen de los consejos de estos especialistas en viajes, que en un ranking publicado recientemente establecieron cuáles son los mejores lugares en el
mundo para satisfacer diversos gustos.
Una buena forma de orientar una búsqueda de destino turístico suele ser investigar en qué sitios del planeta se consiguen experimentar de mejor manera aquellos gustos que nos hacen singulares. Facilitar las claves para encontrar, recorrer y disfrutar esos lugares, distingue y prestigia a una publicación especializada.
Desde que a principios de los años 70 Maureen y Tony Wheeler publicaron, con unos pocos dólares, una guía para recorrer Asia, producto de su propia experiencia, su iniciativa editorial de viajes no paró de crecer. Hoy, adaptada a los años que corren, Lonely Planet cuenta con más de 450 empleados y más de 200 autores/viajeros experimentados e independientes que presentan informaciones atractivas y valiosas, y aportan claves en relación a los destinos que reportan. Convertidas en las guías más vendidas en el mundo y las preferidas por los viajeros independientes, sus recomendaciones no pueden pasarse por alto.
Recientemente, Lonely Planet reveló un ranking con los destinos que, de acuerdo a su staff de profesionales, mejor satisfacen las preferencias específicas de cada turista. Así, los amantes del café no deberían dejar de visitar preferentemente la capital de Etiopía, Adis Adeba. Aquellos que disfrutan de la arquitectura urbana, obligadamente deberán llegar hasta Barcelona para admirar sus edificios únicos.
Las mejores playas para surfear será posible encontrarlas en Ciudad del Cabo, en Sudáfrica. Al que disfruta pasear en bicicleta, la publicación le sugiere conocer la ciudad de Stateside, en Portland. En tanto, los jóvenes encontrarán el mejor destino para la vida nocturna en Belgrado.
Entre estos y muchos otros lugares señalados con bastante precisión por Lonely Planet, Mendoza ha sido designada como mejor destino para tomar vino. Para la publicación, Mendoza es la mejor región de los vinos y se destaca por su Malbec, siendo además un excelente punto para extender la visita turística al resto del país, dada su ubicación geográfica.
Un destino de vinos mundial
Históricamente conocida por ser una protagonista industrial del vino a escala nacional, Mendoza sigue exhibiendo estadísticas que la ponen a la cabeza de la producción vitivinícola del país: 71% de la superficie implantada del país, más del 50% de la producción de uva, el 70% en la elaboración del vino y más del 30% en mosto, 80% de las exportaciones de vino argentino son de Mendoza. En nuestra relación industrial con el mundo contamos con 360 bodegas exportadoras comercializando a 130 países.
Sin embargo, no son estas estadísticas las que Lonely Planet ha considerado a la hora de postular a Mendoza como el mejor destino de vino. Para encontrar las verdaderas razones, hay que entender el cambio que Mendoza ha experimentado desde el momento en que comenzó a percibir que el turista, además de paisajes, busca conocer y vivenciar una cultura.
Mendoza pertenece al selecto grupo de las Grandes Capitales Mundiales del Vino, red que aglutina a las regiones vitivinícolas que ponen una notable experiencia turística a disposición del visitante.
La experiencia de la cultura del vino es una oferta permanente en Mendoza. No sólo contamos con la mundialmente reconocida Fiesta Nacional de la Vendimia, la segunda fiesta de la cosecha más importante del mundo según la National Geographic.
Disponemos de más de 130 bodegas abiertas al turismo y de una política privada y pública atenta a acercar al público a las mismas. Ciclos gratuitos como los de Música Clásica o Tango por los Caminos del Vino ofrecen la posibilidad de combinar conciertos, espectáculos o cine con un brindis en bodegas, constituidas en inmejorables escenarios.
En otros momentos, las atracciones estarán dadas por el deporte o el culto al auto deportivo antiguo, como en los casos de las maratones entre viñedos o el Rally de las Bodegas. Todas son iniciativas que buscan acercar a locales y viajeros a nuestras bodegas y viñedos para que conozcan su historia, las etapas y secretos de la producción de un vino, e incluso tengan la posibilidad de cosechar uvas si se está en temporada.
Bodegas, fincas, spas temáticos, lujosos lodges, alojamientos rurales y toda una gama de emprendimientos relacionados con el turismo del vino y la gastronomía ofrecen, durante todo el año, una propuesta que integra una importante variedad de posibilidades: degustaciones, comidas bien maridadas, paseos en bici y cabalgatas entre viñedos, muestras de arte y clases de cocina, entre otras muchas actividades.
via prensa mendoza