La cocina une comunidades de diferentes etnias y culturas como ningún otro lenguaje alrededor del mundo. En cada pueblo y cada casa hay miles de historias esperando a ser contadas, e iremos en la búsqueda de todos aquellos que atesoran esas vivencias familiares.

Historias de abuelas, transmitidas de generación en generación, un boca a boca incansable que trasciende fronteras y épocas. Las aventuras de sus abuelos llegando a esta tierra, la cocina en sus fogones y hornos a leña, conservando los secretos mejor guardados de la familia.

Recetas únicas, con sabores y aromas inolvidables, que dejaron marcas imborrables en la niñez, una niñez cargada de hermosos recuerdos y añoranzas de mejores tiempos.

Recorrer las rutas es importante, pero sin pasar de largo, que sentido tiene devorar kilómetros, cartel tras cartel, el nombre de un pueblo o ciudad quedando atrás y después de otro, sin conocer la inmensidad cultural que dejamos a nuestro paso. No es sino ingresando por esos pequeños caminos y huellas que conducen a esos pueblos que aún se conservan intactos, como tanto tiempo atrás, que se puede tener la experiencia total. Una suma de momentos y experiencias inolvidables.

Comenzamos una hoja de ruta, un libro en blanco, una bitácora vacía con ansias de llenarla con las más adorables historias de pueblo, las recetas olvidadas contadas por esa Doña María que hay en casa lugar, luciéndose con sus mejores empanadas o su mejor locro o cualquier Don Carlos, el parrillero del pueblo, ése que se luce en cada fiesta, contando sus secretos al rescoldo.

La fiesta local desconocida fuera del pueblo, la que se difunde en la radio de la otra cuadra, la radio solidaria que se mete de lleno en los asuntos de su gente, festejo importante para sus habitantes y que generalmente se desconoce fuera de el, pues vivimos en un mundo regido por redes sociales, olvidando lo importante para ocuparnos de lo inmediato, efímero y viral.

Así iniciamos nuestro camino, con pasos lentos pero seguros, una senda que nos lleva por lugares encantadores de toda la Argentina y luego por el resto de América, rescatando en nuestra investigación de la Olla Ancestral, los sabores e historias relacionadas con las cocinas populares, las ancestrales, las nativas.
Ollas que fueron luego invadidas por sabores extraños de tierras lejanas y esa mixtura, ese cruce cultural con Europa, esa fusión que llamamos cocina criolla que hecho raíces por toda América Latina y Argentina no es la excepción. Nuestra Misión, provincia a provincia, pueblo a pueblo, rescatar el saber culinario y transmitirlo, como en la antiguedad a todo aquel que esté dispuesto a oír.
Nos vemos en la ruta.!

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