En italiano, sugo alla puttanesca; en español, jugo (salsa) a la prostibularia, es una salsa típica del centro de Italia que, por supuesto, se suele preparar fundamentalmente para acompañar

cualquier tipo de pasta. Ingredientes como el tomate, las anchoas en salmuera, aceitunas, guindilla y por supuesto el aceite de oliva virgen extra, todos en proporciones justas, hacen único este acompañamiento para cualquier plato de pasta.

Un plato de pasta a base de tomate, anchoas, alcaparras y olivas negras como arma para la seducción, aunque fuera inicialmente por el estómago. A decir verdad, la popularidad del plato se propagó por toda Italia tan rápido como suele prepararse. También fuera del país.

Tanto es así que hoy en día se pueden encontrar los spaguetti o unos penne alla puttanesca entre la oferta de muchísimos restaurantes de todo el mundo, no necesariamente sólo en los especializados en cocina italiana. Precisamente en virtud de ese origen, las regiones que adoptaron la receta como propia son la Campania y el Lazio, donde se suele remarcar que se añadieron las anchoas a la elaboración original.

Del origen etimológico de esta salsa alla puttanesca no hay una historia definitiva, pero sin dudas remite al conocido como el oficio más antiguo practicado por las mujeres. La más generalizada de las versiones encuentra fundamento en que durante la Edad Media, las prostitutas llevaban una vida nocturna que no les dejaba tiempo ni energías para llegar al mercado tan temprano, razón por la cual se conformaban con productos que aún quedaban y que podían guardar y disponer luego en cualquier momento.

Otra historia cuenta que los pescadores que arribaban al puerto de Nápoles visitaban las casas de cita de la ciudad y pagaban a las prostitutas los servicios recibidos con pescado en salazón, sobre todo anchoas. Las damas comenzaron a preparar a su vez una salsa con las anchoas que conjuntamente con la pasta ofrecían a sus clientes marinos, y más tarde, cuentan, se decidieron a vender.

Sea cual fuera el origen de esta salsa deliciosa, es de agradecer que nos haya sido legada, enriquecida sin dudas por unos ingredientes tan representativos de la dieta mediterránea, que además de otorgar el sabor incomparable de la región, ya es más que sabido lo saludables que son. Pongámonos el delantal entonces y a cocinar estos riquísimos Fetuccine alla puttanesca.

puttanesca

Receta

Ingredientes

Para 2

300 gr de tu pasta favorita (preferentemente fetuccine)
3 o 4 tomates bien maduros
4 filetitos de anchoas
2 cucharadas de alcaparras en salmuera
8 aceitunas negras
1/2 guindilla/chile
1 diente de ajo
aceite de oliva virgen extra
100 gr de queso duro rallado (pecorino, reggianito, parmesano)
1 cucharadita orégano fresco
perejil al gusto
sal

Paso a paso

Hacer dos cortes superficiales en cruz a los tomates antes de ponerlos en el agua para que te sea más fácil quitarles luego la piel
Blanquear los tomates durante dos minutos en agua hirviendo
Sacalos del agua caliente, ponelos en agua muy fría y a continuación retira la piel y rompelos con las manos. Resérvalos.
Si queres ver en detalle cómo escaldar los tomates pincha aquí.
En una sartén pone el aceite de oliva virgen extra (2 o 3 cucharadas).
Deja calentar un poco y agrega el diente de ajo laminado y la punta de la guindilla.
Antes de que se doren (fuego bajo a medio) agrega los filetitos de anchoa desmenuzados, las alcaparras y las aceitunas.
Incorpora el tomate que teníamos reservado y el orégano, mezcla bien, verifica la sal y deja unos pocos minutos tapado.
Deja reposar caliente hasta que tengas la pasta lista.
Para la pasta, pone a hervir abundante agua en un recipiente que lo permita.
Cuando comience a hervir, agrega sal y a continuación la pasta el tiempo que indique el fabricante.
Transcurrido el tiempo, escurri bien y mezcla con la salsa alla puttanesca, sartenea para que se mezclen bien los sabores.
Servi, agrega el queso rallado y espolvorea con perejil picado

Puede parecer a muchos una salsa fuerte desde el punto de vista del sabor, pero el equilibro o proporciones de los ingredientes la hacen irresistiblemente sabrosa. Todos los componentes tienen su justo protagonismo, aunque sean poquitos. La guindilla le da un toque picantón, por eso si usas una que sabes es fuerte, emplea solo una puntita. Una pasta Irresistible para comer en pareja.