Bridar significa, atar o amarrar una proteína de forma envolvente, con el fin de conseguir una cocción perfecta y que no se deforme mientas se cocina. Cortar una pieza de carne
perfectamente cilíndrica o compacta es prácticamente imposible, por ello, esta se brida para que mantenga una forma vistosa y elegante. Del mismo modo, es un mecanismo efectivo para que la cocción sea uniforme y no queden partes más cocidas que otras.
Por lo general, los alimentos bridados se hacen al horno, guisados o a la brasa. Es un procedimiento muy común en carne vacuna y de cerdo, sobre todo con el lomo, la parte más tierna y sensible. Para preparar platos rellenos también es una excelente opción, pues con la carne se hace una especie de rollo que queda fijo y bien sujeto.
Las aves también se pueden bridar, especialmente, cuando están deshuesadas. De esta manera, se pueden rellenar o simplemente darles una forma uniforme.
¿Cómo bridar?
- Empezamos cortando un trozo de hilo de unos 2 m si es una pieza pequeña como un solomillo de cerdo o hasta 3 m si se tratase de un trozo mas grande (si nos quedamos cortos, se puede agregar al primer hilo haciendo un nudo).
- Hacemos un nudo en uno de los extremos, pero sin apretar demasiado, simplemente dejaremos que el hilo se ajuste a la carne.
- Continuamos haciendo lazadas que van rodeando la pieza de carne una y otra vez hasta llegar al otro extremo, teniendo en cuenta que el hilo central que une todos las lazadas quede recto, sin apretar, solo sujetando.
- Cuando lleguemos al otro extremo, damos la vuelta a la pieza de carne y vamos pasando el hilo por cada una de las lazadas hasta llegar al extremo inicial, donde ataremos los dos extremos del hilo y ya podemos condimentar y cocinar la pieza de carne.
- También se podría cortar el hilo al final, pero es mejor cortarlo antes porque así te aseguras que el hilo no toca la carne cruda.