Los croissants son unos de los simblos franceses en el mundo, Pero son Franceses? La historia más difundida en cuanto a su origen es la que vincula la creación de esta delicia a la
invasión turca. Corría el 1683 y el imperio Otomano avanzaba por Europa en su guerra contra el Imperio Romano Germánico. Con el gran visir Kara Mustafá al frente tras conquistar Constantinopla, los Balcanes y parte de Hungría el ejército turco avanzaba dispuesto a invadir Viena, pero la ciudad estaba rodeada por completo por una muralla. Los 200.000 soldados otomanos decidieron entonces cavar túneles por debajo de la muralla que los llevase directamente al centro de la urbe y sorprender a sus habitantes en mitad de la noche.
Como de todos es sabido, ser panadero es una profesión sacrificada en la que es necesario madrugar mucho para poder tener pan recién hecho a primer hora de la mañana cada día, es por ello que los panaderos vieneses, eran de los pocos habitantes despiertos a esa hora y presenciaron la emboscada de los turcos pudiendo así dar la voz de alarma, despertar al resto de la ciudad aún dormida y detener el ataque.
Para celebrar la victoria y la resistencia de la ciudad de Viena contra los turcos, los panaderos crearon un bollo en forma de luna creciente, sumbolo del Imperio otomano.
Fue la reina Maria Antonieta, de origen austriaco, la que hizo llegar a la corte de Versalles el croissant junto con otros productos y dulces que acabaron por formar parte de la cultura culinaria francesa.
Pero hasta que llegue el momento de poder probarlos en alguna boulangerie o cafe parisino, podemos perfectamente prepararlos en casa e imaginar que estamos allí, no?
Receta
Ingredientes
(15 croissants de tamaño medio)
Masa
- 120 ml de leche entera
- 110 ml de agua
- 2 huevos grandes
- 25 gr de levadura fresca
- 500 gr de harina de fuerza
- 65 gr de azúcar
- 10 gr de sal
Relleno:
- 250 grs de mantequilla sin sal (a temperatura ambiente pero que no esté muy blandita)
Brillo de yema:
- 2 yemas
- Chorrito de leche
Almíbar:
- 80 grm de azúcar
- 40 ml de agua
- Llevar a ebullición el agua junto con el azúcar, hasta que el azúcar se haya disuelto por completo. Dejar reposar hasta que temple. Con este almíbar daremos brillo a los croissants una vez estén listos y fuera del horno. (Prepararlo antes de comenzar la receta para que se asiente y quede espeso)
Preparación
- Mezclar la leche junto con el agua, y añadir la levadura hasta integrarla.
- En el bol principal donde haremos nuestra masa, tamizaremos la harina de fuerza, e incorporaremos la sal, el azúcar y los huevos.
- A continuación echamos nuestra mezcla de leche, agua y levadura en dos veces, mezclando después de cada incorporación.
- Después de la segunda incorporación, batiremos con nuestra amasadora (o con las manos) la mezcla hasta obtener una masa manejable y algo pegajosa, pero sin excedernos en su manipulación.
- Una vez tenemos la masa lista, haremos una bola, y la dejaremos reposar 45 min en el bol, tapada con papel film (si es en un lugar cálido, mucho mejor).
- Pasado ese tiempo, volveremos a amasarla de nuevo, pero ahora sólo con las manos.
- La volvemos a dejar reposar y tapada con papel film, pero ahora de 4 a 8 horas, y en el frio.
- Pasado ese tiempo, sacamos la "bola" de masa del bol y la ponemos encima de nuestra zona de trabajo, con un poquito de harina para evitar que se nos pegue, y hacemos una cruz (más o menos así):
- Ahora estiraremos los 4 extremos (de la cruz) con el rodillo, dejando el centro más grueso.
- Por otra parte, metemos la mantequilla dentro de papel film y estiramos con ayuda del rodillo formando un rectángulo de 1 cm de grosor (más o menos).
- A continuación pondremos la mantequilla en el centro grueso de la masa.
- Vamos a ir tapando la mantequilla como vemos en la foto, quitando la harina que pueda haber quedado en la masa con la ayuda de un pincel o papel (siempre quitaremos el exceso de harina antes de hacer los pliegues):
- En este momento, vamos a estirar nuestra masa dándole forma de rectángulo, con 1 cm de grosor es suficiente:
- Ahora vamos a darle la primera vuelta haciendo dos pliegues. La parte de fuera, la cerramos hacía nosotros, y la otra parte la plegamos encima de esta.
- Envolvemos nuestro "paquete" en papel film y lo introduciremos en el frio durante 20 min.
- Después de esta primera vuelta vamos a darle la segunda. Lo ponemos frente a nosotros de la misma forma en que la habíamos metido en el frio, y la estiramos en forma de rectángulo.
- Esta vez haremos el pliegue, de derecha a izquierda, como se muestra en la foto:
- La envolvemos de nuevo en papel film y la guardamos durante 20 min en la nevera.
- Sacamos la masa del frio, y vamos a darle la tercera y última vuelta.
- Ponemos nuestra masa frente a nosotros como en la vez anterior, la estiramos de nuevo formando un rectángulo, y esta vez plegaremos de izquierda a derecha como vemos en la imagen, la volvemos a introducir en el frio durante 30 min.
- Como ya hemos dado la última vuelta, y hemos tenido nuestra masa durante media hora más en el frio, ahora toca sacarla y estirarla como en las anteriores veces, hasta conseguir que tenga 1 cm de grosor aproximadamente.
- Cortamos este rectángulo por la mitad, y vamos a empezar a cortar los triángulos que serán croissants dentro de un ratito.
- Los triángulos deben tener unos 8 cm de base (aprox.). Podemos hacer una plantilla y ayudarnos con ella.
- En este momento ya podemos empezar a formar nuestros croissants.
- ¿Cómo? Pues muy fácil!! Tomamos un triángulo, y lo vamos a estirar sin miedo, tanto por la parte superior como por la inferior, así lo haremos más fino y manejable.
- A continuación comenzaremos a enrollarlo por la parte más ancha, de fuera hacía dentro (hacía nosotros), hasta acabar con el "piquito" por dentro. (Esto es un truquito para que a la hora de hornearlos no se nos abra el pico hacia arriba). Le damos la forma de cangrejo, llevando los extremos hacía dentro.
- Si queres rellenarlos, podes hacerlo con pepitas de chocolate por ejemplo.
- Así, antes de comenzar a enrollar, y cuando ya hemos estirado el triángulo, ponemos el relleno que más nos guste en el centro. (En lugar de pepitas de chocolate, también podríamos poner una cucharadita de nutella (Receta aqui), o alguna otra opción.
- Cuando ya los tenemos listos en nuestra bandeja de horno (forrada con papel vegetal), vamos a dejarlos reposar hasta que doblen su tamaño (entre 1 y 2 horas).
- Para ayudar a que crezcan más rápido, debemos ponerlos en un lugar cálido (cerca del horno encendido, en un lugar tibio...)
- Y cuando han aumentado su tamaño, los untaremos con ayuda de un pincel de nuestro brillo de yema. ¡¡Que queden bien cubiertos!!
- En este momento, pondremos el horno a precalentar a 160ºC. Y cuando hayan pasado 10 min, introduciremos nuestro croissants en el horno, durante 13-15 min aproximadamente. ¡¡Tienen que quedar doraditos!!
- Y en el momento que los saquemos del horno vamos a pintarlos con el almíbar que teníamos preparado, y los pasamos a una rejilla para que enfríen y además que caiga el exceso de almíbar que hayamos puesto.