Esta es una variación de las clásicas galletas de vainilla. La naranja con el chocolate es una combinación genial, ya sea en un bizcocho, budines, cupcakes, asi que las galleta no defraudarán.
El resultado es una galleta muy crujiente con un ligero sabor a naranja y con el retrogusto del chocolate que las convertiran en una de tus favoritas.
Preparar galletas no es nada complicado, cualquiera puede hacerlas. Tal vez sea un poco más complejo el tema de estirar la masa uniformemente y darle forma a las galletas, ó también los tiempos de enfriado, que requieren de paciencia porque si esperas obtener tus galletas en cuestión de una hora, esta no es tu receta. En cualquier caso merece la pena y mucho ya que obtendrás un montón de riquísimas galletas que además bien conservadas te pueden durar bastantes días, incluso meses, aunque dudo mucho que lleguen a tanto, ya que verás que en cuestión de dos o tres días no te queda ni una.
Receta
Ingredientes
- 300 gr. de harina
- 100 gr. de azúcar glass
- 180 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 huevo
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- 1/4 de cucharadita de sal
- El jugo de 1/2 naranja
- La ralladura de una naranja
- Un chorrito de leche
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 80 gr. de chocolate cobertura
Paso a paso
- Tamizamos juntos la harina, la levadura y la sal y reservamos.
- Batimos la mantequilla con el azúcar en una batidora hasta que se mezclen bien ambos ingredientes.
- Añadimos entonces el huevo que batimos un poco previamente y continuamos batiendo hasta que se integre bien en la mezcla.
- Añadimos entonces el extracto de vainilla y la ralladura de naranja.
- Bajamos la velocidad y comenzamos a añadir la harina.
- Echamos primero la mitad y batimos un poco.
- Añadimos el jugo de naranja y continuamos batiendo.
- Echamos el resto de la harina y el chorrito de leche y batimos hasta obtener una masa lisa aunque es posible que te resulte un poco pegajosa.
- Estiramos la masa de unos 2 cm, la envolvemos en film transparente y la introducimos en la heladera una hora por lo menos.
- Pasado este tiempo, dividiremos la masa en dos, estírando la masa entre dos papeles de hornear y con ayuda de un rodillo.
- El grosor dependerá de cómo quieras las galletas. 6 mm.es un buena espesor.
- Una vez que tengamos las dos masas bien estiradas, las volvemos a introducir en la heladera otra hora por lo menos.
- Las sacamos y les damos la forma deseada con ayuda de un corta galletas.
- Vamos ubicando las galletas sobre la bandeja de horno donde las vayamos a hornear, con el fin de no manipularlas mucho y las volvemos a meter en la heladera unos 20 minutos, esta vez para que se endurezcan un poco y no pierdan la forma durante el horneado.
- Precalentamos el horno a 180ºC.
- Sacamos las galletas de la heldera y las introducimos en el horno durante 15 minutos aproximadamente o hasta que observes que los lados comienzan a dorarse sin llegar a tostarse demasiado.
- Sacamos la bandeja del horno y dejamos que reposen las galletas durante 5 minutos en la misma bandeja, antes de pasarlas a la rejilla donde finalmente acabarán de enfriarse.
- Vamos derritiendo el chocolate a baño maría o en el microondas y lo introduciremos en una manga pastelera de plástico, un cornet de papel de horno, o en su defecto una bolsita de freezer.
- Con unas tijeras cortaremos el extremo pero con la intención de dejar un agujerito muy pequeño y así poder hacer lineas finitas como las de la foto.
- Cuando las galletas estén completamente frias las colocaremos sobre una bandeja y las decoraremos con el chocolate fundido de la manera que más nos guste.
Tip
Podes utilizar chocolate blanco, negro o con leche o incluso los tres, o simplemente dejarlas sin nada, porque la galleta solas son muy ricas.